Sí, los Kaldos Keat pueden ayudarte a bajar de peso.
Con ellos puedes cazar dos pájaros de un tiro:
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Subir tus defensas
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Reducir kilos o centímetros extra
Y sabemos que ambos puntos son cruciales durante esta pandemia, pues más del 70% de los pacientes hospitalizados por COVID-19 tienen sobrepeso u obesidad (aquí puedes leer más) y la mayor parte de las personas que entran en problemas graves al contagiarse tienen un sistema inmune debilitado o envejecido.
Te explicamos cómo utilizar los Kaldos Keat para alcanzar estos objetivos y por qué funcionan.
Cómo usarlos
Recomendamos tomar 2 kaldos al día durante al menos una semana.
¡La constancia es clave para conseguir resultados! Pide tus kaldos aquí.
Sigue este protocolo:
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Al despertar, toma al menos un vaso de agua tibia o caliente.
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Cuando sientas hambre, toma tu primer Caldo Keat.
Es importante que sea lo primero que recibe tu estómago, pues así tu cuerpo podrá aprovecharlo mejor. Agrégale jugo de limón, pues mejora su sabor y contiene vitamina C que ayuda a tu organismo a aprovechar mejor los nutrientes. -
Para la mayoría de las personas, un caldo es suficiente como desayuno.
En especial si le añades aguacate, pues las grasas saludables también te dan sensación de saciedad. Si aún sientes hambre, puedes agregar un desayuno que sea saludable. Por ejemplo: huevos pochados con verduras asadas y aguacate. -
Procura no comer entre comidas y bebe mucha agua.
Si sientes hambre o antojos, bebe un vaso de agua. Muchas veces confundimos el hambre con sed. Si después de 10 minutos aún tienes hambre, puedes comer un snack saludable, como verduras frescas picadas (pepino, jícama, coco, apio, etc.) o alguno de los snacks de Keat. -
Durante el día, no pases más de una hora seguida sentado.
Basta con una hora de sedentarismo para afectar la circulación en tu cuerpo y aumentar el riesgo de que desarrolles hipertensión, sobrepeso, resistencia a la insulina, etc. La ventaja es que incluso unos minutos de movimiento físico ayudan a prevenir este deterioro. Puedes poner una alarma cada 50 minutos para recordar que es tiempo de caminar un poco, subir escaleras o estirarte. Procura salir a caminar todos los días (10,000 pasos al día pueden ayudarte a conseguir resultados impresionantes) o hacer sesiones de movimiento que respeten tu cuerpo, como el entrenamiento de intervalos o HIIT, yoga, tai chi, chi kung, etc. -
Cuando llegue la hora de comer, asegúrate de que la mayor parte de tu plato sean vegetales.
Ya sea en ensalada, verduras asadas, zucchini noodles o cualquier receta que se te ocurra, pero siempre te conviene un plato rebosante de vegetales. Incluye un poco de carne de animales distintos, idealmente orgánicos, y grasas saludables (como aceite de oliva, nueces y semillas, coco, aceitunas, ghee). Evita alimentos procesados (pasta, harinas refinadas, aceites vegetales, bebidas azucaradas, postres, etc.) Si vas a usar aderezos o salsas, prepáralos en casa o pídelos en Keat. -
Para la cena, disfruta de tu segundo caldo.
Nuevamente, añádele limón y si quieres, aguacate, cebolla, cilantro, etc. Busca que sea al menos 2 horas antes de ir a dormir para que tu cuerpo pueda hacer digestión. Además, asegúrate de dejar pasar al menos 12 horas entre tu cena y el desayuno del día siguiente. Son 12 horas que tu cuerpo utilizará para todo lo que no puede hacer mientras está haciendo digestión, como desechar las toxinas que ya no le sirven y reparar los tejidos que lo necesitan. -
Dormir temprano es importantísimo para obtener resultados.
Procura que sea cerca de las 10 pm, pues entre las 10 pm y las 4 am nuestro organismo lleva a cabo procesos de regeneración de tejidos que no pueden suceder en otro momento. La noche es para reparar y rejuvenecer tus células. Saca los aparatos electrónicos de tu cuarto y procura que haya oscuridad total, tus ojos descansarán tan bien como tu mente y la producción de melatonina aumentará. El caldo también ayudará a tu cuerpo a producir los neurotransmisores que necesitas para descansar mejor.
Como podrás ver, el protocolo no es difícil, pero es importante seguirlo para obtener resultados. Dentro de tu cuerpo estarán transformándose muchas reacciones químicas que harán que tu organismo pueda dejar ir el peso que ya no le sirve, como te contamos a continuación.
Por qué funcionan los Kaldos Keat para perder peso
La razón es simple: funcionan porque atienden las causas del sobrepeso.
Muchas personas creen que la causa del sobrepeso es comer de más y que la solución es reducir calorías y hacer ejercicio.
Pero nuestros cuerpos son mucho más complejos que eso. La causa más común que nos hace subir de peso son las toxinas acumuladas en el cuerpo, pues se almacenan en tejidos menos activos, como la grasa. Nuestro cuerpo sube de peso para protegernos de esa toxicidad tratando de diluirla en una mayor grasa corporal.
Si seguimos la estrategia común para bajar de peso a toda costa (reducir calorías y hacer ejercicio intensivo), nuestro cuerpo va a recibir una inundación de toxinas que pueden causar muchos síntomas y enfermedades. Además, es muy probable que dañemos nuestro metabolismo y que recuperemos en poco tiempo el peso perdido.
Otras causas comunes del aumento de peso son:
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Que el cuerpo no pueda regular bien la insulina y la glucosa.
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Que haya un desbalance en la microbiota o una infección.
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Que el cuerpo esté recibiendo estrés excesivo en cualquiera de sus formas: ejercicio extremo, toxinas en alimentos y productos, aire contaminado, estrés emocional, sueño de mala calidad, etc.
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Que las células y los órganos tengan inflamación crónica.
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Que el organismo no tenga oportunidad de limpiarse y repararse (por comer continuamente y durante la noche, no dormir suficiente o a deshoras, etc.)
Los Kaldos Keat —en conjunto con los hábitos del Método Keat que te compartimos en el protocolo de arriba— ayudan a atender todos estos desbalances, día con día. Por eso son ideales para ayudarte a perder peso (o centímetros) saludablemente, sin dañar tu metabolismo y sin rebotes.
No sólo lo notarás en tu peso, sino en el resto de tu organismo:
en tu nivel de energía, en tu piel, tus huesos y tus articulaciones (¿a quién le viene mal una dosis diaria de colágeno natural?), en tu digestión (adiós gastritis, estreñimiento e inflamación) y en tu calidad de sueño. Los beneficios más notorios son distintos para cada quien, pero para todos son transformadores.
Nos va a encantar escuchar tu historia después de esta semana de inmersión en Kaldos Keat que en conjunto con el Método Keat te ayudarán a recuperar tu peso y tu figura.
Recuerda que puedes repetirla cada mes o cada 15 días para seguir mejorando tus resultados. Pide tus kaldos aquí ¡y compártenos cómo te fue!